En medio de una intensificación del conflicto en Siria, los grupos rebeldes han designado a Mohamed al Bashir como líder del gobierno provisional hasta marzo de 2025. La decisión busca fortalecer el control administrativo en las regiones bajo dominio rebelde, tras una serie de ofensivas exitosas en ciudades clave como Alepo y Hama.
La coalición rebelde, integrada por diversas facciones, algunas con posturas radicales como el grupo Hayat Tahrir al-Sham (HTS), ha logrado avanzar hacia Homs, una posición estratégica próxima a la capital Damasco. Estos avances representan uno de los mayores desafíos para el régimen de Bashar al Asad desde 2020 y han provocado el desplazamiento de miles de civiles, especialmente en comunidades alauitas que temen represalias.
La designación de Al Bashir subraya la necesidad de los rebeldes de consolidar su estructura política y administrativa frente a las fuerzas del gobierno, que cuentan con apoyo militar ruso. La situación continúa siendo volátil, con enfrentamientos que reflejan el intento de los rebeldes por derrocar al régimen de Asad y establecer una alternativa gubernamental viable